La Cueva del Tabaco se volvió un lugar histórico cuando las tropas francesas estaban por tomar la Ciudad de México, en el siglo XIX. El país, gobernado por Benito Juárez, vivía épocas convulsas puesto que el territorio quería ser conquistado por las potencias europeas y fue cuando decidió llevar al norte los documentos más importantes de la Nación.
Era 31 de mayo de 1863, cuando el presidente Juárez decidió trasladar los poderes de la Unión al interior del país, de tal manera que no se perdiera el control ni la gobernabilidad ante la intención intervencionista de Francia y entonces de decidió llevar lejos de la capital a los documentos jurídicos y legales que sostenían la soberanía de México, el llamado Archivo de la Nación.
La autonomía nacional contenida en estos documentos legales y jurídicos se trasladó entonces hacia San Luis Potosí; luego a Saltillo y Monterrey y el destino final era a Chihuahua.
Para aligerar el paso en camino al estado más grande de México, Juárez decidió esconder 11 carretas de documentos en un escondrijo natural ubicado en el territorio del hoy municipio de Matamoros, Coahuila.
Este lugar era conocido como Cueva del Tabaco y, curiosamente, esta fue la sede inhóspita de la Comarca Lagunera que albergó durante 4 años los documentos más importantes de la historia de México: el Archivo General de la Nación.
¿Por qué es importante la Cueva del Tabaco?
En medio de un proceso bélico en el que Francia quería invadir a México y adueñarse de la gobernabilidad del país, Benito Juárez escondió en la Cueva del Tabaco el Archivo General de la Nación. Uno de los papeles más importantes que se escondieron en ese paraje natural fue el Acta de Independencia, así como los decretos de creación de las entidades federativas.
Cuenta la historia que Juárez nunca conoció la Cueva del Tabaco, sino que confió ciegamente en el señor Juan De la Cruz Borrego, quien tenía la responsabilidad de resguardar el archivo en conjunto con campesinos, leñadores y personas que eran de su total confianza.
La Cueva del Tabaco también refleja la valentía del pueblo de Matamoros y es que al menos 5 custodios del Archivo General de la Nación fueron torturados y asesinados por tropas francesas: Martín Ortiz, Pablo y Manuel Arreguín, Telésforo Reyes y Gerónimo Salazar murieron en defensa y honor de la soberanía nacional. Pese al maltrato, jamás abrieron la boca. Fueron fieles a la encomienda del presidente Juárez.
Preservar a la Cueva del Tabaco
Cientos de laguneros y laguneras no conocen la Cueva del Tabaco. Saben que hay un lugar, allá por Matamoros, en el que Juárez escondió unos papeles, pero no se han tomado un fin de semana para tocar sus paredes, para consumir historia y para descubrir el legado de lucha y resistencia que Matamoros heredó para la historia de México.
Por muchos años, la Cueva del Tabaco fue olvidada por los tres niveles de gobierno. Nadie hizo nada por remodelar el lugar y hacerlo atractivo para las y los turistas. El Gobierno Federal, principalmente, no le rindió tributo a un lugar que hospedó los documentos más valiosos del país.
Hace unos años, descendientes de los custodios que fueron asesinados, formaron el Órgano Coadyuvante de la Cueva del Tabaco, una Asociación Civil que trabaja en la recaudación de fondos para remodelar, preservar y dar mantenimiento al lugar. Allí, la Asociación ya colocó palapas, bancas de concreto, se construyó pavimento, se instalaron sanitarios y se han realizado varias etapas de reforestación.
Con esto, una vez más el pueblo de Matamoros demostró que se sabe organizar. Que está luchando por preservar ese rincón, cercano al ejido Congregación Hidalgo, en el que México escondió sus secretos más ocultos.
Matamoros, Coahuila, debe ser reconocido como una de las sedes más importantes de la historia de México. La defensa de las tropas francesas no se puede explicar sin tocar el capítulo del Archivo General de la Nación, su defensa y su preservación.
Honor a la Cueva del Tabaco y al pueblo de Matamoros que, desde el Siglo XIX, se distingue por defender sus ideales, por su lealtad y por su infatigable resistencia.